lunes, 21 de diciembre de 2015

La Cabrera circular y Pico de la Miel

Animados por la aventura de Peña Cebollera, tres de los componentes del grupo nos animamos a algo más dulce: El Pico de la Miel, dentro de un paseo circular a La Cabrera...

Un paseo bonito, con vistas espectaculares y alguna cima que nos apuntamos en la libreta para otra ocasión.
Lo de circular es verdad, aunque debido a un problema de batería no se aprecie; el punto final del mapa es el Hostal donde nos tomamos las cervecillas de rigor, a unos 2 km de la salida,



Llegamos al Pueblo de la Cabrera, en la subida al Convento de San Antonio, y dejamos el coche para subir poco a poco por el via crucis al Convento. A esa hora está cerrado pero se puede visitar. La carretera que hemos seguido coincide con el sendero GR 10, que será nuestro guía buena parte del camino, hasta llegar a la localidad de Valdemanco. Antes de llegar al Convento, en la última curva, tenemos un desvío a nuestra izquierda, el GR 10, por un sendero ya de tierra.

Pasado un pequeño collado, nos encontramos con las vistas de Valdemanco (más alguna macro urbanización horrorosa en medio de la nada...) a nuestra derecha vamos rodeando la Sierra de La Cabrera.




Llegados al cementerio de Valdemanco remontamos a la derecha por el PR-M 13 (marcas blanca-amarilla) y acabamos llegando a la vertiente norte, que recorreremos ya a una altura más o menos constante.

 
Sin dificultades hasta el momento, un pequeño valle a nuestros pies, se convierte en un balcón a toda la zona del Lozoya




Nos toca subir de nuevo hasta llegar al collado Alfrecho, para lo que hay que desviarse un centenar de metros del camino. Allí almorzamos al sol, a los pies de un majestuoso Cancho Gordo, el cual dejaremos para otro día. Las vistas hacia Madrid y la carretera de Burgos son de postal.


Cancho Gordo desde el collado Alfrecho

Volvemos al sendero para dirigirnos al Pico de La Miel. Por el camino, rastros de jabalíes y montones de buitres que anidan en las rocas.


El equilibrio en las rocas  da un poco de vértigo...

Por fin alcanzamos a ver nuestra cima del día: el Pico de la Miel



Lo subimos por entre los bloques que aparecen justo enfrente en la fotografía, llegando a una concurrida cima llena de escaladores ya que en su cara sur hay varias vías de escalda muy apreciadas por los amantes de este deporte...

Las vistas son una sorpresa inesperada, casi en vertical sobre el pueblo de La Cabrera, con kilómetros de mi conocida A1 a la vista

 Alberto, Alfonso y yo nos movemos a una pequeña cima lindante con la principal, más tranquila



 La bajada del pico no es complicada, salvo por algún resbalón en rocas que parecen secas, pero sin ningún peligro.
Retomamos la PR-M 1, para llegar al Hostal a por nuestras merecidas cervezas, después de posar bajo la nueva cima hollada por los "chicos" de "Al Filo..."
El año que viene, más y mejor!

lunes, 14 de diciembre de 2015

Peña Cebollera (28/11/2015) 2.129 m.

¡Qué vagos estamos!. Hasta finales de noviembre no hemos hecho nuestra segunda salida montañera del año... Espero que el 2016 seamos más activos, porque sino nos van a cerrar el blog por falta de actividad...

Por fin, y gracias a la determinación de Alberto, conseguimos quedar un nº considerable de miembros del grupo para recorrer una zona hasta ahora virgen para nosotros, la de Somosierra y Sierra de Ayllón. El objetivo final: Peña Cebollera o de las Tres Provincias, ya que en su cima se juntan las provincias de Madrid, Segovia y Guadalajara.
Tomamos como base un recorrido circular hecho con raquetas con la variante de Las Chorrerras de los Litueros ( o de Somosierra) al principio del recorrido.



Quedamos a una hora temprana (para algunos) y, tras una hora e viaje, nos plantamos en el puerto de Somosierra, el de toda la vida, sobre los túneles.
Con bastante niebla nos dirigimos por la antigua nacional un1 km casi clavado a la derecha se encuentra una entrada con unos carteles y señales por donde se adentra el sendero que nos llevará a la Chorrera. La niebla y poca agua hicieron que no las viéramos en todo su esplendor, pero en época de deshielo tiene que ser espectacular


Continuamos subiendo por la empinada pista  unos 2,5 km. hasta encontrar cortafuego que nos unirá en unos 500 m de ascenso pronunciado a un ancho sendero que nos subira hasta la cumbre; en este sendero unas veces vamos por la provincia de Segovia y otras por la de Madrid, es el cordal que separa el valle de la Cebollera parte Madrileña Sur de las faldas Norte Segoviana, hasta alcanzar las Peñas del Reajo del Oso, donde ya estaremos a unos 500 m de la cumbre pricipal de hoy.



En esta zona paramos a almorzar y reponer fuerzas, con un cielo ya algo despejado que nos permitió disfrutar de unas magníficas vistas sobre los pueblos de la vertiente segoviana a lo alrgo de la A1.






 Vista hacia Madrid, con un precioso mar de nubes...

El último repecho hasta la cumbre es empinado e interminable y, según subimos va apareciendo una fina capa de nieve y escarcha helada.


Llegamos a cumbre, 2.129 m. con las fotos de rigor...



Y a bajar!. Lo hicimos por el camino habitual hasta que, en un momento dado, el instinto bajador de Alberto se manifestó para convencernos de hacer una clásica "directa", marca de "Al Filo de lo Complicadillo", que acortó bastante el camino... (como bien se aprecia en la vista fotográfica de la ruta...)




Al final, retomamos la pista forestal para, tras un agradable paseo al sol, llegar de nuevo a Somosierra y celebrar nuesta nueva salida con las cervecillas de rigor...


lunes, 30 de marzo de 2015

A Peñalara por el tubo central (21/3/2015)

El pasado 21 de marzo, Iñigo y el que esto escribe nos animamos a subir a Peñalara. La idea era subir primero hasta la laguna de Peñalara y allí ascender por el tubo central hasta la cornisa, Una vez en la cornisa, subir tranquilamente hasta la cima de Peñalara. A pesar del mal tiempo que habíamos tenido toda la semana, según los pronósticos ibamos a tener una ventana de tiempo relativamente tranquilo entre las 09:00 y las 15:00. Desgraciadamente no fué así, como veréis después. Salimos de Madrid a las 07:30, llegando al parking de Cotos una hora después. Una delgada capa de nieve sobre el asfalto nos recibió, consecuencia de la débil nevada que caía en ese momento.
Tras una breve parada técnica en Venta Marcelino, nos encaminamos animosamente por la pista que conduce hasta la laguna
Acercándonos hacia la laguna
 El magnífico circo de Peñalara apenas se distinguía
Cerca de la laguna, se adivinan ya los arranques del canal central y el canal de la ceja, a la izquierda de la fotografia
 El inicio del canal de la ceja y del canal central ya desde la laguna. Se adivinan dos grupos que han comenzado la ascensión de ambos.
 Fotos de rigor en la laguna, congelada y cubierta de nieve
 Iñigo
Iñigo preparándose al pie del tubo central, como un profesional
 En mitad del tubo, poco antes de llegar a la depresión situada a los pies del tubo
 La subida fué bastante cómoda, con una ligera capa de nieve reciente (10-15 centimetros) sobre una capa anterior de nieve dura
 Casi desde el inicio de la subida del tubo, una niebla espesa nos impidió sacar fotos que merecieran la pena. Desde la cornisa nos encaminamos, siguiendo a un grupo de 6 personas, hasta la cima de Peñalara, a merced de una fuerte ventisca en ocasiones muy molesta. Peñalara no quería visitas hoy, se había enfadado. En la cima, foto rápida, un poco de agua y para abajo, que las vistas eran inexistentes. !!Una pena!!

Decidimos volver sobre nuestros pasos pensando en principio bajar por la pista que pasa por la Hermana menor. Sin embargo, a medida que descendíamos nos dábamos cuenta que la cosa se estaba poniendo un poco fea, con una niebla cada vez más cerrada, una ventisca muy fuerte y la ropa que comenzaba a empaparse. Poco a poco fuimos pensando que tal vez otra opción podía ser volver a bajar por el tubo central. Después de un montón de vicisitudes, tanteos y pruebas, mezclado con bastante despiste, encontramos la bajada por el tubo. En el tracking (en verde) superpuesto al mapa podéis ver las vueltas que dimos a la bajada, alrededor de Dos Hermanas, hasta que dimos con el camino correcto. El despiste incluye un inicio de descenso hacia el lado segoviano. Reconocemos sin ningún pudor que por momentos empezamos a sentirnos un poco agobiados. Encontrar el tubo fué un alivio para los dos.

 Iñigo terminando de descender el tubo, entre la niebla.

La conclusión es: no hay que perderle el respeto a la montaña. Nunca pensé que podría perderme alguna vez en el macizo de Peñalara, donde tantas veces he estado. !!Siempre se aprende algo!!